lunes, junio 25, 2007

Un año...

...y no tenía imaginación para anticipar lo hermosa, dulce y divina Renata. Un año de tu preciosa vida, dicen algunos que el año más importante y puede ser... pues en este año aprendiste cosas muy fundamentales como respirar, comer, "conversar", bailar, producir música con tu boca y objetos, a acariciar... "casi" a caminar, también que los cajones se salen y que los gatos rasguñan... entre otras muchas cosas, como yo también he aprendido mucho contigo.

Mis agradecimientos sinceros hacia la vida, por lo recorrido y por seguir este camino, madre/hija, por el tiempo que viene...


(Esto sale fecha 25 pero publicado el 26)

PD: Te dejó saludos la Carola con la Emilia, muy temprano llamó tu tata, después tu tía Antonia, tu abuela Cristi, tu tío Alvaro... todos me encomiendan saludarte de su parte, te van a visitar menos tu tío que está en Valdivia me dijo que cuando crezcas te cuente que él llamó... entonces mejor lo anoto para que no se me olvide. Hoy tendremos celebración pequeña e íntima, el sábado con más gente y fanfárrea.

viernes, junio 22, 2007

Aniversario


Dos nacimientos. Su vida maravillosa y mi biografía de madre.


Ya se va a cumplir un año y a veces me parece que ha pasado muy rápido... pero también ha pasado "mucha agua bajo el puente", revolucionando todo, cambiando la vida, mi vida en muchas formas... Trato de volver a esos momentos, pero como sucede con casi todos mis recuerdos, algo cuesta. Especie de vacíos, quizás apenas sensaciones y la atmósfera de un sueño, con sus interrupciones, saltos, distancias y silencios... Quise un parto "diferente". Finalmente no pude decidir respecto de algunas cosas importantes, pero ocurrió como casi todo en mi vida: "bastante bien". Cerca de un mes y medio antes me decidí a cambiar de equipo médico, al anticipar que mi doctora parecía más partidaria de un parto inducido y controlado "por ella", que de considerar que había otros deseos, posibilidades y necesidades en juego. Y no sabía donde buscar ni a quién recurrir. Llegué por internet a un equipo especializado en "parto en el agua", y aunque la relación al final no fue del todo de mi gusto, me sentí tranquila y satisfecha de haber tomado la decisión. Sucedió todo muy rápido. Difícil tomar decisiones, hacer preguntas... En menos de una hora llegué a la clínica, llené unas fichas de registro, hicieron el monitoreo fetal, se rompió la bolsa y me llevaron a un frío pabellón... En menos de una hora nació Renata... pero pasaron dos horas más para que pudiera estar con ella... juntas "de nuevo", al fin a solas, hija, no fue como esperábamos pero traté de compensar con muchos besos, palabras, susurros, promesas... Y nunca supe bien por qué no pudo ser en el agua, creo que fue muy rápido todo, pero parece además que el cordón estaba algo corto lo que hizo necesaria más intervención de lo esperado...
Por fortuna nos dieron el alta muy pronto. Y ya quería salir rápido de allí, pero qué trámites: que el último examen, que tenía que ir a arreglar las cuentas, pero que tenía que salir en silla de ruedas, los cheques, un lío. Y al llegar a casa lo que más esperaba era que estuviéramos al fin solas en nuestro hogar, el que hube preparado para ese momento... y mudarla por primera vez. Sola con ella. A vérnosla con todo lo que vino enseguida: noches y días sin distinción, lidiar con el reflujo, pero por suerte todo bien con la lactancia aunque la leche que desborda, empapando todo pero al menos sabía que tenía de sobra... Y hubo también espacios de escuchar música y el silencio de ese invierno, en el que pasaban a veces varios días sin que nadie viniera a nuestra casa... pero cantamos, no nos aburrimos ni pensamos más de la cuenta... Y ella, tan dulce e inocente... pequeñita, divina, un milagro cósmico...
Grabé algunos videos cortitos de Renata en sus primeros días. Los miro y no lo puedo creer. Lo que sabía en esos momentos: qué pena que tengas que crecer!!! La tristeza y extrañeza de vivir momentos tan sublimes y efímeros como ellos solos...
PD: En este año la clínica - a todo esto la misma en la que nació mi hermana 23 años atrás- tuvo varios problemas: la cerraron, vendieron y... demolieron.

miércoles, junio 13, 2007

De vuelta

Renata estuvo dos semanas sin ir a la sala cuna a causa de un virus sincicial que atacó sin piedad al 80% de sus compañeritos. Algunos al parecer la pasaron bastante mal. Ella, por suerte se lo pasó muy suavecito, y "de pelos" quedándose con su tía -mi hermanita que por fortuna está con tiempo este año.
Hoy volvió a la sala cuna y había solo cuatro niños, qué suerte también! casi una tía para cada uno... porque -pienso- ya se le había olvidado de qué se trataba eso, ella ya creía que era quizás una etapa superada de su vida (el tiempo tan largo que es para los bebés y niños...), y está regalona como ella sola, es casi una re-adaptación.
Otra bendición de la Providencia: mi trabajo me permite flexibilidad en mis horarios y tengo una socia comprensiva, que además está con una ola de vitalidad positiva que nos ha permitido arreglarnos con el trabajo a pesar de que yo he estado rindiendo a medias estos días...
Llenas de regalos. Renata es muy fuerte, alegre, dulce, un encanto... a punto de cumplir un año y yo ni imaginaba que la tarea iba a ser tan grande...
Bueno, pero con esto del invierno y las enfermedades, me ha venido a colación este tema: es bonito esto de cuidarse, de cuidar, que el abrigo, que el cariño, que los remedios y todos los resguardos que vienen al caso. Antes no tenía esas nociones, en realidad nunca me importó. Pero tiene que ver con el amor. Seguro se traduce en nociones de autocuidado para la vida "adulta", aunque nunca están de más los mimos, apoyos y consejos.
A cuidarse todos!!!

PD: la foto, tomada por su tía en estos días. Así se lo pasaron.